lunes, 22 de noviembre de 2010

Fauna Rapa Nui

La fauna terrestre silvestre de Isla de Pascua es muy pobre desde el punto de vista de su diversidad, lo que la diferencia notablemente de otras islas polinésicas, de gran importancia son unas lagartijas pequeñas Gekkonidae Lepidodactylus lugubris (moko uru-uru kau) y Ablepharus boutoni poecilopleurus (moko uri uri), ocasionalmente aparecen en Hanga Roa la tortuga verde (Honu) Chelonia mydas  japónica, tortuga carey Eretmochelys imbricata bissa. Las aves marinas de importancia son kena (Sula dactylatra), tavake (Phaeton rubricauda), makohe (Fregata minor), kakapa (Pterodroma arminjoniana), y kuma (Puffinus nativitatis). Existen dos gaviotines (Sterna lunata y S. fuscata) y gaviotín hada o kia kia (Gygis alba), los cuales eran parte de la tradición del Tangata Manu



 
Moko uru-uru kau
(Gekkonidae Lepidodactylus lugubris)



  
Moko uri uri
(Ablepharus boutoni poecilopleurus)

  
Honu
(Chelonia mydas  japónica)


 
kena
(Sula dactylatra)

 
Tavake
 (Phaeton rubricauda)

Makohe
(Fregata minor)


kakapa
(Pterodroma arminjoniana)



kuma
(puffinus nativitatis)



Sterna lunata y S. fuscata

hada o kia kia
(Gygis alba)


jueves, 18 de noviembre de 2010

Flora Rapa Nui

A diferencia de otras Islas de Polinesia, la flora de Rapa Nui no presenta gran diversidad y endemismo, actualmente su vegetación puede caracterizarse como una sabana seca con un estrato herbáceo abundante, con algunas asociaciones boscosas exóticas. Esta situación es confirmada por las descripciones de los primeros navegantes, quienes señalan la pobreza de su flora y la inexistencia de bosques.

Sin embargo, los estudios paleobotánicos y arqueológicos nos señalan que la vegetación de Rapa Nui no siempre ha sido como la conocemos en la actualidad, en los últimos 38 mil años han existido grandes variaciones tanto en la composición de la flora como en su abundancia y distribución. Una de las principales conclusiones de estas investigaciones, es la existencia en épocas prehistóricas de asociaciones boscosas extensas especialmente distribuidas en los alrededores de los principales volcanes isleños.

Antes de la llegada de los colonizadores polinesios, los cambios en la vegetación estuvieron probablemente influenciados por los cambios climáticos desde el fin del Pleistoceno hasta el Holoceno. Otro factor que se debe mencionar son los episodios de intenso volcanismo que soportó la isla hace 10 a 12 mil años, testimonio de estos son las improntas de troncos de una especie de Palmera extinta, encontrados en los flujos de lavas que formaron la línea costera en varios sectores de la isla.

Sin duda, los mayores cambios se registran con la llegada del hombre en el siglo V D.C. Los Colonos introducen diversas especies vegetales como ñame o uhi (Discorea Alata), taro (Colocasia Esculenta), plátanos o Maika (Musa Sp.), Camote o kumara (Ipomoea Batatas), caña de azúcar o Toa (Sacharum Officinarum) y ti (Cordyline Terminalis), calabaza o Hue, Ipu Kaha (Lagenaria Siceraria), Mahute (Broussonettia Papyrífera), mako'i (Thespesia Populnea), y marikuru (Sapindus Saponaria).
 

Ñame o Uhi (Discorea Alata)
  
 

 Taro (Colocasia Esculenta),
 
Plátanos o Maika (Musa Sp.)
 


Camote o kumara (Ipomoea Batatas)

Caña de azúcar o Toa (Sacharum Officinarum)

Calabaza o Hue, Ipu Kaha (Lagenaria Siceraria),

Mahute (Broussonettia Papyrífera)

Mako'i (Thespesia Populnea)

Marikuru (Sapindus Saponaria).

Paralelamente comienza la agricultura de tala y roza, que aparentemente fue un factor determinante en la extinción de la Palmera endémica de la Isla (Paschalococos Disperta), y probablemente de otras especies leñosas como el Sándalo (Santalum Sp.), sobre estas especies sólo quedan vagas referencias en Leyendas y cantos antiguos. Por otro lado la introducción de ciertas especies invasivas como la Rata Polinesia se cree que también contribuyó a la extinción de especies, cabe recordar que estos roedores, sin más depredadores que el hombre pudo multiplicarse alimentándose de los cocos de la Palma Rapa Nui y disminuir sus posibilidades de reproducción.

Tradicionalmente se asocia la extinción de los Bosques a la explotación de recursos forestales para el trasporte de Moai y la Construcción de Ahu. Efectivamente la ejecución de estos trabajos debió demandar una enorme cantidad de troncos de Palmera y cuerdas, elaboradas a partir de la corteza de Hau Hau (Triumffeta semitriloba).

Hacia el Siglo XVIII, amplios sectores de la isla se encuentran con una escasa cobertura herbácea y se presentan algunos bosquetes relictuales sobrevivientes, especialmente de Toromiro (Sophora Toromiro), Mako´i (Thespesia Populnea) y Hau Hau (Triumffetta Semitriloba). De esta forma los primeros navegantes Europeos que la visitan constatan su pobreza y se inicia el “enigma” sobre el traslado de las estatuas megalíticas.

En el siglo siguiente se introducen nuevas especies vegetales, especialmente de origen europeo y comienza la crianza intensiva de Ganado, especialmente Ovino, que significará el golpe de gracia a las especias endémicas sobrevivientes, produciéndose la extinción del Sándalo hacia 1880, la del Toromiro en 1956, y actualmente del Hau Hau, que está a punto de desaparecer del medio natural, ya que sólo quedan dos ejemplares en el interior del cráter del volcán Rano Kau.

Hau Hau (Triumfetta semitriloba)
Las especies introducidas dominan el paisaje actual de la isla, destacando entre las leñosas varias especies de Eucaliptos, Melias y Guayabas, entre las herbáces destacan las introducidas Here Hoi (Sporobolus africanus), el Toroko (Sorghum halepense), también en años recientes se ha propagado por el interior el Mauku Piro (Melinnis Minutiflora), especie invasiva que al ser quemada genera por su contenido aceitoso una alta temperatura, con el consiguiente daño al suelo.


Eucaliptos
Melias

Here Hoi (Sporobolus africanus),

Toroko (Sorghum halepense),

Mauku Piro (Melinnis Minutiflora)